jueves, 28 de enero de 2010

28 DE ENERO: MEMORIA OBLIGATORIA DE SANTO TOMÁS DE AQUINO



SEGUNDO TEXTO DEL OFICIO DE LECTURA DE LA MEMORIA
De las Conferencias de santo Tomás de Aquino, presbítero
(Conferencia 6 sobre el Credo)



¿Era necesario que el Hijo de Dios padeciera por nosotros? Lo era, ciertamente, y por dos razones fáciles de deducir: la una, para remediar nuestros pecados; la otra, para darnos ejemplo de cómo hemos de obrar.
Para remediar nuestros pecados, en efecto, porque en la pasión de Cristo encontramos el remedio contra todos los males que nos sobrevienen a causa del pecado.
La segunda razón tiene también su importancia, ya que la pasión de Cristo basta para servir de guía y modelo a toda nuestra vida. Pues todo aquel que quiera llevar una vida perfecta no necesita hacer otra cosa que despreciar lo que Cristo despreció en la cruz y apetecer lo que Cristo apeteció. En la cruz hallamos el ejemplo de todas las virtudes.
Si buscas un ejemplo de amor: Nadie tiene más amor que el que da la vida por sus amigos. Esto es lo que hizo Cristo en la cruz. Y por esto, si él entregó su vida por nosotros, no debemos considerar gravoso cualquier mal que tengamos que sufrir por él.
Si buscas un ejemplo de paciencia, encontrarás el mejor de ellos en la cruz. Dos cosas son las que nos dan la medida de la paciencia: sufrir pacientemente grandes males, o sufrir, sin rehuirlos, unos males que podrían evitarse. Ahora bien, Cristo, en la cruz, sufrió grandes males y los soportó pacientemente, ya que en su pasión no profería amenazas; como cordero llevado al matadero, enmudecía y no abría la boca. Grande fue la paciencia de Cristo en la cruz: corramos también nosotros con firmeza y constancia la carrera para nosotros preparada. Llevemos los ojos fijos en Jesús, caudillo y consumador de la fe, quien, para ganar el gozo que se le ofrecía, sufrió con toda constancia la cruz, pasando por encima de su ignominia.
Si buscas un ejemplo de humildad, mira al crucificado: él, que era Dios, quiso ser juzgado bajo el poder de Poncio Pilato y morir.
Si buscas un ejemplo de obediencia, imita a aquel que se hizo obediente al Padre hasta la muerte: Como por la desobediencia de un solo hombre -es decir, de Adán- todos los demás quedaron constituidos pecadores, así también por la obediencia de uno solo todos quedarán constituidos justos.
Si buscas un ejemplo de desprecio de las cosas terrenales, imita a aquel que es Rey de reyes y Señor de señores, en el cual están escondidos todos los tesoros de la sabiduría y de la ciencia, desnudo en la cruz, burlado, escupido, flagelado, coronado de espinas, a quien, finalmente, dieron a beber hiel y vinagre.
No te aficiones a los vestidos y riquezas, ya que se reparten mi ropa; ni a los honores, ya que él experimentó las burlas y azotes; ni a las dignidades, ya que, entretejiendo una corona de espinas, la pusieron sobre mi cabeza; ni a los placeres, ya que para mi sed me dieron vinagre.

ORACIÓN
Señor Dios nuestro, que hiciste admirable a santo Tomás de Aquino por su sed de santidad y por su amor a las ciencias sagradas, te pedimos que nos des su luz para entender sus enseñanzas y fuerza para imitar su vida. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios, por los siglos de los siglos.

miércoles, 27 de enero de 2010

UN ARTÍCULO INTERESANTE DE WWW.RELIGIONDIGITAL.COM SOBRE LA RELIGIÓN EN HAITÍ



La religión está fuertemente enraizada en la gente
Haití se aferra a Dios
Los fieles no renuncian a seguir en contacto con Dios para afrontar la tragedia



Unos dan gracias a Dios por haber sobrevivido, otros ruegan por el alma de sus muertos
Puerto Príncipe era un lugar lleno de pequeñas iglesias de las que ahora no quedan más que restos de cruces, alguna vidriera e imágenes hechas pedazos. Hasta la catedral ha quedado prácticamente derruida.
Sin embargo, ello no impide que cada día cientos de haitianos se congreguen en el exterior de lo que queda de estos recintos religiosos para rezar y para asistir a misas y rituales religiosos improvisados.
Unos dan gracias a Dios por haber sobrevivido, otros ruegan por el alma de sus muertos. Los más buscan consuelo para su dolor y un remanso de paz en medio de la tragedia y el caos en el que ha quedado sumido el país tras el seísmo.
Cantos hasta que sale el sol
Los cánticos religiosos han llenado el aire de este reducto caribeño. Las voces y los rezos a veces se escuchan ininterrumpidamente desde el anochecer hasta que sale el primer rayo de sol.
Siempre al aire libre. Los templos han quedado asolados o completamente en ruinas, lo que obliga a celebrar este tipo de ritos a la intemperie.
La iglesia de Saint Pierre es uno de los pocos templos capitalinos que aún sigue en pie, pero los daños que ha sufrido, invisibles a primera vista, provocan una inseguridad y un temor que hace que los feligreses se conformen por quedarse en sus inmediaciones. No quieren, no se atreven a entrar.
Por este motivo, los sacerdotes de la iglesia organizan las misas diariamente en pequeños solares cerca de los recintos. Cientos de personas se acercan a ellos y se acomodan entre los restos de los bancos, en sillas viejas o en el mismo suelo.
El servicio religioso se lleva a cabo en un altar improvisado y sirviéndose de los utensilios que no han sido robados. Los crucifijos se han sacado cuidadosamente de entre las ruinas...
Quien no cabe en este singular templo asiste tras las rejas que aún rodean lo que fue el antiguo recinto, los que pasan de largo se detienen lo suficiente para santiguarse y continuar su camino.
Y la vida continúa
"Valor y respaldo mutuo", proclama el cura en medio de su plegaria. Todo el mundo sabe a qué se refiere.
En las afueras del templo, la vida sigue con su caótico frenesí. Frente a la iglesia se alza, en plena plaza Saint Pierre, en Petionville, uno de los cientos de campamentos de refugiados que plagan la ciudad en estos días.
Miles de personas apuran la última hora de luz para lavarse, acumular agua en un tanque traído recientemente por una ONG o cocinar algún alimento. Los niños juegan alborotados entre los adultos que, más serios, escuchan atentamente a un hombre que da instrucciones para recibir vales de comida.
Los coches pasan sin parar, algunos con la música alta. Los vendedores hacen una última ronda antes de llevarse de nuevo el carrito con algún alimento o refresco.
Un oasis en medio de la agitación
Nada de esto parece escucharse una vez traspasada la puerta del solar donde se celebra la misa. Allí, la dulce voz de una mujer entona un cántico que hace olvidar todo el caos exterior.
Otra mujer pasa el cepillo, quien tiene algo, introduce unas monedas, quien no, lo deja circular hasta el siguiente feligrés. Todos se dan la mano, logran esbozar una sonrisa a pesar de las numerosas tragedias personales que han sufrido.
"Rezo para que Dios nos ayude y nos dé un poco de fuerza", explica una de las numerosas mujeres que asisten "cada día" a la misa vespertina. "Rezar nos ayuda", corrobora otra.
Raíces religiosas profundas
La religión está profundamente arraigada en Haití. Prácticamente todo se encomienda al "Bon Dieu", el "Buen Dios", desde el establecimiento de lotería hasta el colorido "tap tap", el transporte público por excelencia en este país.
Ante lo poco que les queda y la mucha incertidumbre que les espera, los haitianos se aferran a la fe. Es lo único que, hasta el momento, no parece haberles arrebatado el terremoto.(RD/Agencias)

martes, 26 de enero de 2010

26 DE ENERO: MEMORIA OBLIGATORIA DE SAN TIMOTEO Y SAN TITO, OBISPOS



SEGUNDO TEXTO DEL OFICIO DE LECTURA DE LA MEMORIA
San Juan Crisóstomo, obispo

De las homilías (Homilía 2 sobre las alabanzas de san Pablo: PG 50, 480-484)
Pablo, encerrado en la cárcel, habitaba ya en el cielo, y recibía los azotes y heridas con un agrado superior al de los que conquistan el premio en los juegos; amaba los sufrimientos no menos que el premio, ya que estos mismos sufrimientos, para él, equivalían al premio; por esto, los consideraba como una gracia. Sopesemos bien lo que esto significa. El premio consistía ciertamente en partir para estar con Cristo; en cambio, quedarse en esta vida significaba el combate; sin embargo, el mismo anhelo de estar con Cristo lo movía a diferir el premio, llevado del deseo del combate, ya que lo juzgaba más necesario.

Comparando las dos cosas, el estar separado de Cristo representaba para él el combate y el sufrimiento, más aún el máximo combate y el máximo sufrimiento. Por el contrario, estar con Cristo representaba el premio sin comparación; con todo, Pablo, por amor a Cristo, prefiere el combate al premio.

Alguien quizá dirá que todas estas dificultades él las tenía por suaves, por su amor a Cristo. También yo lo admito, ya que todas aquellas cosas, que para nosotros son causa de tristeza, en él engendraban el máximo deleite. Y ¿para qué recordar las dificultades y tribulaciones? Su gran aflicción le hacía exclamar: ¿Quién enferma sin que yo enferme?; ¿quién cae sin que a mi me dé fiebre?

Os ruego que no sólo admiréis, sino que también imitéis este magnífico ejemplo de virtud: así podremos ser partícipes de su corona.

Y, si alguien se admira de esto que hemos dicho, a saber, que el que posea unos méritos similares a los de Pablo obtendrá una corona semejante a la suya, que atienda a las palabras del mismo Apóstol: He combatido bien mi combate, he corrido hasta la meta, he mantenido la fe. Ahora me aguarda la corona merecida con la que el Señor, juez justo, me premiará en aquel día; y no sólo a mí, sino a todos los que tienen amor a su venida. ¿Te das cuenta de cómo nos invita a todos a tener parte en su misma gloria?

Así pues, ya que a todos nos aguarda una misma corona de gloria, procuremos hacernos dignos de los bienes que tenemos prometidos.

Y no sólo debemos considerar en el Apóstol la magnitud y excelencia de sus virtudes y su pronta y robusta disposición de ánimo, por las que mereció llegar a un premio tan grande, sino que hemos de pensar también que su naturaleza era en todo igual a la nuestra; de este modo, las cosas más arduas nos parecerán fáciles y llevaderas y, esforzándonos en este breve tiempo de nuestra vida, alcanzaremos aquella corona incorruptible e inmortal, por la gracia y la misericordia de nuestro Señor Jesucristo, a quien pertenece la gloria y el imperio ahora y siempre y por los siglos de los siglos. Amén.

ORACIÓN

Oh Dios, que hiciste brillar con virtudes apostólicas a los santos Timoteo y Tito, concédenos, por su intercesión, que, después de vivir en este mundo en justicia y santidad, merezcamos llegar al reino de los cielos. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos. Amén.

lunes, 25 de enero de 2010

25 DE ENERO: FIESTA DE LA CONVERSIÓN DEL APÓSTOL SAN PABLO



SEGUNDO TEXTO DEL OFICIO DE LECTURA DE LA FIESTA
De las Homilías de san Juan Crisóstomo, obispo
(Homilía 2 sobre las alabanzas de san Pablo: PG 50. 477·480)

Qué es el hombre, cuán grande su nobleza y cuánta su capacidad de virtud lo podemos colegir sobre todo de la persona de Pablo. Cada día se levantaba con una mayor elevación y fervor de espíritu y, frente a los peligros que lo acechaban, era cada vez mayor su empuje, como lo atestiguan sus propias palabras: Olvidando lo que queda atrás y lanzándome hacia lo que veo por delante; y, al presentir la inminencia de su muerte, invitaba a los demás a compartir su gozo, diciendo: Alegraos y congratulaos conmigo; y, al pensar en sus peligros y oprobios, se alegra también y dice, escribiendo a los corintios: Vivo contento en medio de mis debilidades de los insultos y de las persecuciones; incluso llama a estas cosas armas de justicia, significando con ello que le sirven de gran provecho.
Y así, en medio de las asechanzas de sus enemigos, habla en tono triunfal de las victorias alcanzadas sobre los ataques de sus perseguidores y, habiendo sufrido en todas partes azotes, injurias y maldiciones, como quien vuelve victorioso de la batalla, colmado de trofeos, da gracias a Dios, diciendo: Gracias sean dadas a Dios, que en todo tiempo nos lleva en el cortejo triunfal de Cristo. Imbuido de estos sentimientos, se lanzaba a las contradicciones e injurias, que le acarreaba su predicación, con un ardor superior al que nosotros empleamos en la consecución de los honores, deseando la muerte más que nosotros deseamos la vida, la pobreza más que nosotros la riqueza, y el trabajo mucho más que otros apetecen el descanso que lo sigue. La única cosa que él temía era ofender a Dios; lo demás le tenia sin cuidado. Por esto mismo, lo único que deseaba era agradar siempre a Dios.
Y, lo que era para él lo más importante de todo, gozaba del amor de Cristo; con esto se consideraba el más dichoso de todos, sin esto le era indiferente asociarse a los poderosos y a los príncipes; prefería ser, con este amor, el último de todos, incluso del número de los condenados, que formar parte sin él, de los más encumbrados y honorables.
Para él, el tormento más grande y extraordinario era el verse privado de este amor: para él, su privación significaba el infierno, el único sufrimiento, el suplicio infinito e intolerable.
Gozar del amor de Cristo representaba para él la vida, el mundo, la compañía de los ángeles, los bienes presentes y futuros, el reino, las promesas, el conjunto de todo bien; sin este amor, nada catalogaba como triste o alegre. Las cosas de este mundo no las consideraba, en sí mismas, ni duras ni suaves.
Las realidades presentes las despreciaba como hierba ya podrida. A los mismos gobernantes y al pueblo enfurecido contra él les daba el mismo valor que a un insignificante mosquito.
Consideraba como un juego de niños la muerte y la más variada clase de tormentos y suplicios, con tal de poder sufrir algo por Cristo.

ORACIÓN

Señor Dios, que has iluminado al mundo entero con la palabra del apóstol san Pablo, haz que quienes recordamos hoy su conversión, imitando sus ejemplos, anunciemos el Evangelio al mundo y seamos así testigos de tu verdad. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios, por los siglos de los siglos. Amén.

viernes, 22 de enero de 2010

"LAS ONGS EN HAITÍ CRITICAN EL SISTEMA DE LOS MILITARES NORTEAMERICANOS DE "TIRAR COMIDA’DESDE LOS CAMIONES



www.elconfidencialdigital.com

"Las ONGs en Haití critican el sistema de los militares norteamericanos de ‘tirar comida’ desde los camiones a la población porque la gente se agolpa y hay altercados"

Las imágenes de las tropas de Estados Unidos dando comida y productos de primera necesidad a la población de Haití han dado la vuelta al mundo. Pero el sistema ‘de tirar los alimentos a la calle’ no es tan eficaz como parece. Genera agolpamientos y tensiones entre los haitianos.
Las organizaciones no gubernamentales que están trabajando entre la población de Haití han acordado un sistema que se está demostrando mucho más eficaz que el empleado por los militares. Según el testimonio recogido por El Confidencial Digital de Jordi Bach responsable de Cesal en el país caribeño el sistema empleado por esta ONG en colaboración con Cáritas es mucho más efectivo:
-- Explican el método que van a utilizar a los responsables de la zona asignada. Y ellos se lo hacen llegar a la población
-- Elaboran un listado de familias con nombre y apellidos. Y a cada una de ellas se les entrega un papel sellado con un número
-- Como cada familia ‘lleva un papel en la mano’ saben que van a recibir algo y se tranquilizan
-- Cuando llega el camión con la comida hacen su cola y la respetan. Reciben los productos y devuelven el papelito
-- Los cooperantes intentan entregar toda la mercancía en el mismo día a los que la piden evitando así frustraciones y enfados.
Al día siguiente todos saben ya cómo tienen que actuar y la población está mucho más tranquila.
Por el contrario, según añade el testimonio del cooperante de Cesal, “en las distribuciones hechas por soldados desde camiones, sin preparación previa, la gente se agolpa y se producen altercados. Todos tienen necesidad”.
La ayuda internacional no acaba de llegar del todo. Se están encontrando con dos problemas:
-- No hay lugares seguros donde almacenar los materiales que están llegando aunque poco a poco se van habilitando algunos almacenes
-- No se puede hacer llegar la ayuda sin una ‘campaña previa de sensibilización y organización’ que intente frenar los desórdenes, del todo comprensibles, añade el cooperante a ECD porque la población está desesperada.
Los aviones aterrizan en el aeropuerto constantemente, un lugar que está siempre rodeado de miles de haitianos buscando trabajo. No arman ningún desorden, dice Jordi Bach. Y no protestan porque saben que la ayuda ha llegado aunque no se ha podido distribuir por problemas logísticos y de organización. Bach se muestra sorprendido y halagado por el comportamiento del pueblo haitiano.
La gente en las calles también les ha hecho llegar a los cooperantes algunas quejas sobre los medios de comunicación, de quien dicen estar cansados. A los equipos de rescate y ayuda les tratan de forma intachable.

22 DE ENERO: MEMORIA OBLIGATORIA DE SAN VICENTE, DIÁCONO Y MÁRTIR




SEGUNDO TEXTO DEL OFICIO DE LECTURA DE LA MEMORIA

San Agustín, obispo


De los sermones (Sermón 276, 1-2: PL 38,1256)
A vosotros se os ha concedido la gracia -dice el Apóstol-, de estar del lado de Cristo, no sólo creyendo en él, sino sufriendo por él.
Una y otra gracia había recibido del diácono Vicente, las había recibido y, por esto, las tenía. Si no las hubiese recibido, ¿cómo hubiera podido tenerlas? En sus palabras tenía la fe, en sus sufrimientos la paciencia.
Nadie confíe en sí mismo al hablar; nadie confíe en sus propias fuerzas al sufrir la prueba, ya que, si hablamos con rectitud y prudencia, nuestra sabiduría proviene de Dios y, si sufrimos los males con fortaleza, nuestra paciencia es también don suyo.
Recordad qué advertencias da a los suyos Cristo, el Señor, en el Evangelio; recordad que el Rey de los mártires es quien equipa a sus huestes con las armas espirituales, quien les enseña el modo de luchar, quien les suministra su ayuda, quien les promete el remedio, quien, habiendo dicho a sus discípulos: En el mundo tendréis luchas, añade inmediatamente, para consolarlos y ayudarlos a vencer el temor: Pero tened valor: yo he vencido al mundo.
¿Por qué admirarnos, pues, amadísimos hermanos, de que Vicente venciera en aquel por quien había sido vencido el mundo? En el mundo - dice- tendréis luchas; se lo dice para que estas luchas no los abrumen, para que en el combate no sean vencidos. De dos maneras ataca el mundo a los soldados de Cristo: los halaga para seducirlos, los atemoriza para doblegarlos. No dejemos que nos domine el propio placer, no dejemos que nos atemorice la ajena crueldad, y habremos vencido al mundo.
En uno y otro ataque sale al encuentro Cristo, para que el cristiano no sea vencido. La constancia en el sufrimiento que contemplamos en el martirio que hoy conmemoramos es humanamente incomprensible, pero la vemos como algo natural si en este martirio reconocemos el poder divino.
Era tan grande la crueldad que se ejercitaba en el cuerpo del mártir y tan grande la tranquilidad con que él hablaba, era tan grande la dureza con que eran tratados sus miembros y tan grande la seguridad con que sonaban sus palabras, que parecía como si el Vicente que hablaba no fuera el mismo que sufría el tormento.
Es que, en realidad, hermanos, así era: era otro el que hablaba. Así lo había prometido Cristo a sus testigos, en el Evangelio, al prepararlos para semejante lucha. Había dicho, en efecto: No os preocupéis de lo que vais a decir o de cómo lo diréis. No seréis vosotros los que habléis, el Espíritu de vuestro Padre hablará por vosotros.
Era, pues, el cuerpo de Vicente el que sufría, pero era el Espíritu quien hablaba, y, por estas palabras del Espíritu, no sólo era redargüida la impiedad, sino también confortada la debilidad.

ORACIÓN

Dios todopoderoso y eterno, derrama sobre nosotros tu Espíritu, para que nuestros corazones se abrasen en el amor intenso que ayudó a san Vicente a superar los tormentos. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos. Amén.

jueves, 21 de enero de 2010

21 DE ENERO: MEMORIA OBLIGATORIA DE SANTA INÉS, VIRGEN Y MÁRTIR


SEGUNDO TEXTO DEL OFICIO DE LECTURA DE LA MEMORIA

San Ambrosio, obispo

Del tratado sobre las vírgenes (Libro I, caps. 2.5.7-9: PL 16 [edición 1845], 189-191)

Celebramos hoy el nacimiento para el cielo de una virgen, imitemos su integridad; se trata también de una mártir, ofrezcamos el sacrificio. Es el día natalicio de santa Inés. Sabemos por tradición que murió mártir a los doce años de edad. Destaca en su martirio, por una parte, la crueldad que no se detuvo ni ante una edad tierna; por otra, la fortaleza que infunde la fe, capaz de dar testimonio en la persona de una jovencita.
¿Es que en aquel cuerpo tan pequeño cabía herida alguna? Y, con todo, aunque en ella no encontraba la espada donde descargar su golpe, fue ella capaz de vencer a la espada. Y eso que a esta edad las niñas no pueden soportar ni la severidad del rostro de sus padres, y si distraídamente se pinchan con una aguja, se poner a llorar como si se tratara de una herida.
Pero ella, impávida entre las sangrientas manos del verdugo, inalterable al ser arrastrada por pesadas y chirriantes cadenas, ofrece todo su cuerpo a la espada del enfurecido soldado, ignorante aún de lo que es la muerte, pero dispuesta a sufrirla; al ser arrastrada por la fuerza al altar idolátrico, entre las llamas tendía hacia Cristo sus manos, y así, en medio de la sacrílega hoguera, significaba con esta posición el estandarte triunfal de la victoria del Señor; intentaban aherrojar su cuello y sus manos con grilletes de hierro, pero sus miembros resultaban demasiado pequeños para quedar encerrados en ellos.
¿Una nueva clase de martirio? No tenía aún edad de ser condenada, pero estaba ya madura para la victoria; la lucha se presentaba difícil, la corona fácil; lo que parecía imposible por su poca edad lo hizo posible su virtud consumada. Una recién casada no iría al tálamo nupcial con la alegría con que iba esta doncella al lugar del suplicio, con prisa y contenta de su suerte, adornada su cabeza no con rizos, sino con el mismo Cristo, coronada no de flores, sino de virtudes.
Todos lloraban, menos ella. Todos se admiraban de que, con tanta generosidad, entregara una vida de la que aún no había comenzado a gozar, como si ya la hubiese vivido plenamente. Todos se asombraban de que fuera ya testigo de Cristo una niña que, por su edad, no podía aún dar testimonio de sí misma. Resultó así que fue capaz de dar fe de las cosas de Dios una niña que era incapaz legalmente de dar fe de las cosas humanas, porque el Autor de la naturaleza puede hacer que sean superadas las leyes naturales.
El verdugo hizo lo posible para aterrorizarla, para atraerla con halagos, muchos desearon casarse con ella. Pero ella dijo:
«Sería una injuria para mi Esposo esperar a ver si me gusta otro; él me ha elegido primero, él me tendrá. ¿A qué esperas, verdugo, para asestar el golpe? Perezca el cuerpo que puede ser amado con unos ojos a los que no quiero».
Se detuvo, oró, doblegó la cerviz. Hubieras visto cómo temblaba el verdugo, como si él fuese el condenado; como temblaba su diestra al ir a dar el golpe, cómo palidecían los rostros al ver lo que le iba a suceder a la niña, mientras ella se mantenía serena. En una sola víctima tuvo lugar un doble martirio: el de la castidad y el de la fe. Permaneció virgen y obtuvo la gloria del martirio.

ORACIÓN
Dios todopoderoso y eterno, que eliges a los débiles para confundir a los fuertes de este mundo, concédenos a cuantos celebramos el triunfo de tu mártir santa Inés imitar la firmeza de su fe. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos. Amén.

miércoles, 20 de enero de 2010

EL ARZOBISPADO DE SANTIAGO, A TRAVÉS DE CÁRITAS, APORTA 10.000 EUROS A LOS DAMNIFICADOS DE HAITÍ


Hoteleine Losama tiene 25 años y es la última persona que ha sido rescatada con vida de los cascotes de Puerto Príncipe.(FOTO:EFE)


EL ARZOBISPADO DE SANTIAGO, a TRAVÉS de CÁRITAS, APORTA 10.000 EUROS a LOS DAMNIFICADOS DE HAITÍ

Santiago, 20 de enero de 2010. El Arzobispado de Santiago decidió ayer por la tarde aportar de sus fondos diocesanos, y a través de Cáritas diocesana, una cantidad de 10.000 euros para los damnificados de Haití. Por unanimidad, la Comisión de Economía decidió realizar esta aportación e invitar a todas las parroquias de la Archidiócesis a que se unan a esta iniciativa promoviendo una Campaña especial de ayuda con este motivo.
Precisamente la semana pasada Cáritas diocesana comprometía una primera ayuda de 30.000 euros ante la situación de extrema urgencia del país caribeño. La presencia de expertos de Cáritas española sobre el propio terreno del desastre garantiza la orientación de la ayuda y la conexión constante con Cáritas Haití facilita la posibilidad de llegar directamente a los más necesitados.
Números de cuenta de Cáritas Diocesana para los posibles ingresos con este fin. Es muy importante que se ponga “Ayuda a Haití”:


Campaña “CÁRITAS CON HAITÍ”
BSCH
0049-2584-92-1010017670
BBVA
0182-5947-14-0016570006
CAIXA GALICIA
2091-0319-20-3040008096
BANCO GALLEGO
0046-0001-29-0000701310
BANCO PASTOR
0072-0134-44-0000100310


PARA MÁS INFORMACIÓN
José Montes, Director de Cáritas Diocesana, 981554433

UN VÍDEO INTERESANTE SOBRE LA IGLESIA EN INTERNET

martes, 19 de enero de 2010

EL DOMINGO CELEBRAMOS LA MEMORIA DE SAN ANTONIO ABAD

El pasado domingo celebramos en la Parroquia de san José de Ares la misa solemne en honor a san Antonio Abad, patrono de los animales. La homilía tuvo como centro en punto 2418 del Catecismo de la Iglesia Católica: "Es contrario a la dignidad humana hacer sufrir inútilmente a los animales y sacrificar sin necesidad sus vidas. Es también indigno invertir en ellos sumas que deberían remediar más bien la miseria de los hombres. Se puede amar a los animales; pero no se puede desviar hacia ellos el afecto debido únicamente a los seres humanos."
Al término de la celebración se bendijeron varios animales que representaban a todas las especies. Cantó el Coro Juvenil. Las catequistas Yolanda y María José se encargaron de ambientar el lugar de la celebración con diferentes carteles. (Fotos: Manolo Vales).









lunes, 18 de enero de 2010

viernes, 15 de enero de 2010

jueves, 14 de enero de 2010

CÁRITAS DIOCESANA DE SANTIAGO ESTÁ COLABORANDO CON LOS DAMNIFICADOS POR EL TERREMOTO DE HAITÍ

A continuación dejamos la carta enviada por Cáritas Diocesana, donde se indica cómo colaborar. (Pinchar sobre ella para verla en grande).


PREPARANDO LA CONMEMORACIÓN DE SAN ANTONIO ABAD, PATRONO DE LOS ANIMALES



El próximo domingo 17 de enero se celebra la memoria de san Antonio Abad, patrono de los animales, y por ese motivo ponemos hoy una serie de puntos del Catecismo de la Iglesia Católica que hablan de este tema, para que los reflexionemos. ¿Nos hemos parado alguna vez a pensar sobre la visión cristiana de los animales?...Pues veamos qué nos dice la Iglesia.

El respeto de la integridad de la creación

2415 El séptimo mandamiento exige el respeto de la integridad de la creación. Los animales, como las plantas y los seres inanimados, están naturalmente destinados al bien común de la humanidad pasada, presente y futura (cf Gn 1, 28-31). El uso de los recursos minerales, vegetales y animales del universo no puede ser separado del respeto a las exigencias morales. El dominio concedido por el Creador al hombre sobre los seres inanimados y los seres vivos no es absoluto; está regulado por el cuidado de la calidad de la vida del prójimo incluyendo la de las generaciones venideras; exige un respeto religioso de la integridad de la creación (cf CA 37-38).
2416 Los animales son criaturas de Dios, que los rodea de su solicitud providencial (cf Mt 6, 16). Por su simple existencia, lo bendicen y le dan gloria (cf Dn 3, 57-58). También los hombres les deben aprecio. Recuérdese con qué delicadeza trataban a los animales san Francisco de Asís o san Felipe Neri.
2417 Dios confió los animales a la administración del que fue creado por él a su imagen (cf Gn 2, 19-20; 9, 1-4). Por tanto, es legítimo servirse de los animales para el alimento y la confección de vestidos. Se los puede domesticar para que ayuden al hombre en sus trabajos y en sus ocios. Los experimentos médicos y científicos en animales, si se mantienen en límites razonables, son prácticas moralmente aceptables, pues contribuyen a cuidar o salvar vidas humanas.
2418 Es contrario a la dignidad humana hacer sufrir inútilmente a los animales y sacrificar sin necesidad sus vidas. Es también indigno invertir en ellos sumas que deberían remediar más bien la miseria de los hombres. Se puede amar a los animales; pero no se puede desviar hacia ellos el afecto debido únicamente a los seres humanos.

miércoles, 13 de enero de 2010

UN ARTÍCULO PARA REFLEXIONAR DE WWW.SOLIDARIDAD.NET


OBAMA Y LA "GUERRA JUSTA"
SOLIDARIDAD.NET

Todo el mundo comenta hoy el discurso del presidente Obama al recibir, el Nobel de la Paz. Resulta paradójico que el presidente del país más violento del mundo, desde hace más de medio siglo, sea premiado con el galardón más importante que se concede a los defensores de la paz. El mismo Obama lo reconoció, de alguna manera. Y justificó su comportamiento, al mantener dos guerras en este momento, echando mano de la teoría de la ‘guerra justa’

(Extracto)


Los especialistas en el tema establecen dos principios para que una guerra se pueda considerar "justa":
a) El "principio de discriminación" según el cual hay que diferenciar claramente los "combatientes" de "los que no intervienen" en los combates. Pero resulta que este principio valía para las guerras antiguas. En las actuales, si tenemos en cuenta los armamentos que se urilizan (bombas, misiles, atentados...), toda la población está iguamente amenazada. Ya no sirve el primer principio.
b) El "principio de proporcionalidad" que establece la proporción que debe existir siempre entre los daños que se causan en la guerra (muertes, sufrimientos, daños colaterales...) y los beneficios que se van a conseguir con la guerra. Pero, ¿qué proporción se puede establecer hoy entre los destrozos que causan los nuevos armamentos y las agresiones que pueden provocar una guerra? ¿No hay otros medios (políticos, diplomáticos...) para intentar conseguir lo que se pretende?.
En este momento, hay en juego en este asunto dos hechos que nunca se pueden olvidar:
1º) La fabricación y el negocio de armamentos bélicos es uno de los negocios más rentables para los países que se dedican a producir armas de violencia y muerte, para venderlas a los países que luego organizan guerras espantosas. Y sabemos que Estados Unidos es el primero de esos países, que mantiene ese negocio criminal.
2º) Un componente determinante de las guerras el "factor religioso" (…) en las guerras contra el fundamentalismo islámico (Irak, Afganistán...). Ahora bien, la religión no se combate a cañonazos. Con eso, lo que se consigue es exacerbar más el fanatismo de los combatientes. Hoy es capital caer en la cuenta de que el fanatismo religioso no se combate con misiles, bombas y armas automáticas… cuando en una guerra entra el juego el factor religioso, eso nos tiene que llevar, no a fabricar más armamentos y mandar más soldados a la masacre. El factor religioso no tiene más solución que la educación para la paz, la renovación de nuestras ideas sobre la "esperanza en la otra vida", repensar en que Dios creemos, buscar a toda costa el mutuo entendimiento, la ayuda mutua, revisar las injusticias que se cometen con otros países... Sólo la bondad es capaz de desarmar a los fanáticos, a los fundamentalistas, a los intolerantes, a los violentos. Yo sé que esto es utópico. Pero sólo las utopías han demostrado que tienen fuerza para cambiar la historia. Por eso propongo que se acaben los "Nobel de la Paz". Y pongamos en marcha los "Nobel de la Utopía".

Autor: J. M. Castillo- Fecha: 2010-01-11